lunes, 17 de agosto de 2009

HAZ UN ALTO, SIENTE Y DEJALO IR...


Cuando decidí escribir este artículo todavía estaba impactada por las palabras que coloqué como título, tomadas de una lectura que hice y que se refieren a aquellos momentos en la vida en los cuales tenemos tanto sufrimiento y dolor, que pensamos no seremos capaces de resistir ni de salir adelante. Realmente estoy completamente segura de la capacidad increíble que tenemos los seres humanos para adaptarnos a los momentos difíciles, para aceptar los grandes cambios y para enfrentarnos a la adversidad en su máxima expresión. Pero así mismo, estoy consciente de lo duro que es hacerlo cuando traemos muchas creencias, tradiciones y tabues al respecto de esto.


Muchas veces nuestros sufrimientos, dolores, angustias, temores y tristezas, realmente se encuentran en nuestros pensamientos y en la forma en como interpretamos las señales que recibimos por tal o cual situación en la cual nos vemos involucrados, dependiendo de como recibamos esas señales, nuestra mente transmite a través de las emociones lo que estamos sintiendo, así es como nos damos cuenta de que nuestros sentimientos dicen lo que hay en nuestro interior... Pero muchas veces nuestros pensamientos nos juegan una mala jugada, un truco que nos confunde o no nos deja ver realmente lo que está sucediendo en nuestro interior porque nos dejamos llevar por ese pensamiento, que nos hace daño y que en vez de ayudarnos a salir adelante, nos hunde en la desesperanza y el desaliento y nuevamente caemos en esa angustia sin saber por qué estamos así.


En su libro, Tus Zonas Erróneas, Wayne W. Dyer, nos explica de una forma sencilla, que nosotros podemos mandar en los pensamientos, tomando la decisión correcta de lo que queremos sentir o como dirigir nuestros sentimientos para que no nos afecten en nuestra vida diaria de forma negativa... Suena algo así como si fueramos sistemas informáticos en los cuales recibimos instrucciones y el resultado dependerá en la forma en que se manejen y se capten los datos. Esta forma de llevar la vida no es nada fácil ya que rompe todos los paradigmas y esquemas regulares de los seres humanos, pero a mi me parece que vale la pena, si con esto logramos salir airosos de todas esas situaciones que nos afectan sobremanera.


La más importante aseveración que hace el autor del libro que les menciono antes es esta: "Los sentimientos no son simples emociones que te suceden. Los sentimientos son reacciones que eliges tener. Si eres dueño de tus propias emociones, si las controlas, no tendrás que escoger reacciones de autoderrota. Cuando aprendas que puedes sentir lo que prefieres o eliges sentir, empezarás a encaminarte por la verdadera senda de la "inteligencia" . Esto para mí, es algo completamente innovador y radical en el sentido de la palabra, son demasiadas cosas, fuerzas, situaciones y rutinas que convergen para sacarte pronto de este plan que te propones. Todo en nuestra sociedad conspira contra tu responsabilidad individual, por lo que te toca confiar en tu capacidad de sentir emocionalmente lo que quieres o prefieres sentir en un momento dado.


Lo más importante de todo esta forma de ser innovadora, es que te permite vivir el presente como debe ser, tratando de no cargar para nada con las angustia de lo que te ha sucedido en el pasado y menos con lo que está por venir. Así existen muchas personas que no se encuentran conformes con su vida cada día y buscan en el pasado algo que las motivó o que les movió el piso, como no encuentren algo, entonces empiezan a preocuparse y angustiarse de lo que puede suceder o de lo que vendrá. Primero hay que hacer un alto urgente a esta forma de pensar, no es fácil cambiarla, ya que estamos acostumbrados por lo que nos va a costar mucho deshacernos de esos pensamientos que nos capturan y nos encierran dentro de nosotros mismos. Dice Dyer que "Es fácil ser feliz, pero aprender a no ser desgraciado puede resultar difícil."


Toda la vida te han enseñado que uno nunca puede controlar las emociones ni los sentimientos, así que partiendo de esa premisa, las cosas se ponen difíciles, todo lo que sientes, ira, miedo, odio, amor, tristeza, son cosas que le pasan a uno y que ya llegan por si solas dependiendo de lo que el destino te depare, solo nos toca aceptarlas porque es así y punto. Lo que significa que uno como individuo no controla estas cosas: simplemente las acepta. A lo que me refiero es que si te sucede algo que te causa verguenza, pues ni modo, te pones rojo, te da verguenza, te quieres esconder, lo que piensas de inmediato es "tragame tierra" y te quedas esperando que esa situación cambie por si sola a algo bueno y diferente que te haga sentir bien. Pues no es así y tenemos que cambiar toda esa forma de sentir y aceptar esos sentimientos porque son así.


Siempre estamos echandole la culpa a las circunstancias, de lo que somos en cada momento. Realmente a las personas que les va bien en la vida, es porque ellas mismas han ido en busca de esas circunstancias que quieren, que le permiten desarrollarse y ser mejores cada día. Si ellas no encuentran esas circunstancias favorables a lo que desean, entonces las hacen a su manera, esto significa que tenemos que ser perseverantes, que no podemos desfallecer en el primer intento en el cual fracasamos y que tenemos que aprovechar las oportunidades que nos ofrece la vida para salir adelante. Cada circunstancia de nuestra vida nos afecta dependiendo de como queremos que nos afecte. Por ejemplo, si sucede un evento que consideramos triste como la muerte de un ser querido, es una situación que en primer lugar, no podemos remediar. Entonces nos toca hacer un alto, sentir y luego dejarlo ir, piensa que si escoges sentirte triste y deprimido, esa es tu elección y así te vas a sentir, o en cambio puedes decidir sentirte tranquila y recordar los momentos buenos que pasaste con esa persona, de inmediato sentirás que tienes paz.


Todo depende de nosotros. La vida es tan corta que merece que la vivamos lo mejor que podamos, y no estar desperdiciendo nuestro tiempo en este tipo de cosas que nos afecta sobremanera. Te pongo algunos ejemplos de los que he podido disfrutar en algunas ocasiones, cambiando mi forma de pensar y por consiguiente mi forma de sentir. Cuando estoy con calor, porque de pronto el clima en el cual me encuentro cambia, pienso que si me quito el abrigo voy a tener que cargarlo y esto me incomoda, entonces me lo dejo puesto y pienso que no hace calor, me desconecto de esa sensación de calor, pienso en otras cosas y al rato me doy cuenta de que se me olvidó de que sentía calor, así que cuando de pronto vuelve a cambiar el clima y hace frío, tengo mi abrigo puesto y no ha pasado nada. Otro ejemplo, es cuando en algunas ocasiones, se encuentra uno con gente desagradable en la calle, esas personas que andan súper amargadas, por lo que en vez de ponerme a la misma altura de ellas, y amargarme también, escojo no hacerles caso, me desengancho de esa actitud y de ese comportamiento, ya que de hacerle caso a quien le salen más arrugas es a mi, a quien se le cocina el hígado es a mi y a quien se le afecta la presión, por supuesto que es a mí.


Mi mayor recomendación es que tratemos todos de vivir y disfrutar del presente, desconéctate del pasado que hace tiempo que se fue y en cuanto al futuro, pues ya tendrá su momento en que llegará y se hará cargo de ti, pero como tiempo presente... que enredo, no? No vale la pena estar todo el tiempo utilizando estos verbos: si hubiera, si deseara, si recordara, si esperara, si lamentara y si me arrepintiera... Tenemos que valorar los momentos presentes, lo que nos sucede en estos momentos, disfrutarlos, no pasarnos la vida esperando un momento que consideramos valioso y cuando llega lo volvemos un completo desastre o no es lo que esperabamos por tener demasiadas expectativas de fábulas... Tenemos que poner alma y corazón en cada momento de nuestra vida, para que al final podamos decir que nuestra vida...Valió la pena!

JeanTdeP

4 comentarios:

Jesús Armando R. dijo...

HOLA JEANNETTE, ESPERO TE ENCUENTRES MUY BIEN. TE COMENTO QUE LEI TU ARTICULO EN "ALMA Y CORAZÓN PANAMÁ" (HAZ UN ALTO, SIENTE Y DEJALO IR ...) Y ME PARECIÓ COMO TODO LO QUE ESCRIBES, MUY INTERESANTE. PARECIERA QUE EN LO MAS SENCILLO NOS COM...PLICAMOS LA EXISTENCIA, ¿NO TE PARECE?. BUENO, YA PLATICAREMOS CON MAS CALMA. RECIBE UN FUERTE ABRAZO Y MIS MEJORES DESEOS PARA TI Y LOS TUYOS. BYE!

Luciano dijo...

Muy bueno para la gente que todavía no ha vivido, tu veras que como pase el tiempo todo ese envuelto de situaciones de dime que te diré, etc., etc. Poco a poco todo pasa a segunda orden. Pasa en segunda orden porque se madura y aprendemos a ubicar con extrema facilidad la cosas en su lugar. Porque por supuesto, sí viviste la vida y sumaste todas tus experiencias, pero mientras estas donde estas y lo que dices es como cuando da una mano a un niño para llevarlo en el camino , para que no se asuste. Esas manos son tus palabra para la gente que crece y va madurando y realizando su vida, y, a veces encuentran situacines que los extravia.

Alberto dijo...

Es un artículo con un mensaje muy profundo, y nos recuerda que siempre podemos controlar nuestras reacciones, sean las circunstancias que sean.

Habría que preguntarse uno mismo, en una situación, por que has elegido enfadarte en vez de utilizar tu mente para crear tranquilidad y paz. Hay que ser conciente cuando te encuentras en medio de una reacción depresiva o de enojo e intentar pensar de un modo diferente y reaccionar de forma inteligente, sin dejarnos llevar por las emociones negativas, que al final no resuelven nada. (Podemos elegir como reaccionar, todo esta en la mente)

Debemos recordar, con frecuencia que no hay nada fuera de ti mismo que pueda hacerte infeliz sin tu consentimiento, puesto que somos la suma total de las elecciones que tomamos en la vida.

Gracias por el articulo Jeannette , te envió un abrazo

Evelia dijo...

Hola Jannette....muy buen artículo...es algo así como lo que dice Coehlo en "Cerrar Capítulos". Tenemos que seguir adelante y aprovechar al máximo lo que Dios nos regala día a día.